Jeffrey Epstein: Asquerosamente rico
![](https://690698d327.cbaul-cdnwnd.com/933b79607cdc42e0ab09a8c72e4ca19e/200000035-c7b76c7b79/15909597361185.jpg?ph=690698d327)
Dirigido por: Lisa Bryant
Duración: 55-57 minutos
País: Estados Unidos
Distribuidor: Netflix
Miniserie en la que conoceremos de primera mano testimonios de varias víctimas del depredador sexual Jeffrey Epstein. Un hombre que utilizó el poder del dinero para llevar a cabo multitud de violaciones y abusos a menores de edad. Nos atrapará desde el primer minuto porque, pese a que conocemos ciertas pinceladas del caso, la mayoría de las personas ignorábamos la complejidad y dimensión del mismo.
Además, el caso toma actualidad debido a las filtraciones que se están ofreciendo desde hace meses desde Anonymous, y en las que se vinculan como responsables de las muertes de Avicii o Paul Walker a una red de prostitución de menores. Y es que lamentablemente, había mucha más gente poderosa vinculada a Epstein y que estaban vinculados de una u otra manera a su negocio pedófilo, y que seguramente a día de hoy intenten borrar huellas.
El relato resulta estremecedor e indignante, ya que conoceremos cómo Epstein, y la que en aquellos momentos era su pareja, Ghislaine Maxwell, construyeron un imperio de la prostitución a menores. Captaban a niñas y adolescentes de entre 12 a 16 años, que ya tenían traumas anteriores y venían de familias desestructuradas, y las convencían para acudir como masajistas a la mansión de Palm Beach. Allí comenzaba el infierno. Todas ellas sufrían abusos sexuales y eran recompensadas con una tarifa estándar de 2oo dólares por "las molestias". La red de menores no dejaba de crecer porque eran algunas de estas mismas chicas las que se encargaban luego de mandar a sus amigas hasta la mansión, con la promesa de Epstein de pagarles 200 dólares por cada nueva chica que llevaran.
Pero los abusos más terroríficos sucederían en la isla privada que el magnate adquirió en las Islas Vírgenes. Allí, amparado por la incomunicación y la privacidad, se llevaron a cabo las mayores atrocidades a menores que nos podamos imaginar. Entre los amigos de Epstein que acudían con asiduidad a la isla podemos encontrar nombres como Donald Trump, Bill Clinton o el príncipe Andrés (Duque de York).
El 23 de julio del 2019, tres semanas antes de su muerte, Epstein había sido encontrado inconsciente y con lesiones en el cuello en su celda de la cárcel. Después de este incidente, fue puesto en vigilancia de suicidio. Seis días más tarde, el 29 de julio, Epstein fue sacado de la unidad de suicidio y colocado en una unidad de vivienda con otro recluso. La cárcel informó al Departamento de Justicia que Epstein tenía un compañero de celda y que un guardia miraba dentro de la celda cada 30 minutos. Estos procedimientos no fueron seguidos en la noche de su muerte. El 9 de agosto, Epstein fue transferido fuera de su celda y no hubo nuevo reemplazo del compañero de celda. Más tarde en la noche, en violación de los procedimientos normales de la cárcel, Epstein no fue visitado cada 30 minutos. Los dos guardias que fueron asignados para revisar la unidad esa noche "se quedaron dormidos" y no lo vigilaron en tres horas. En la mañana, fue encontrado muerto.
Puntuación: 8/10
Escribe: Diego Arbulú